Solo fue necesaria una ola. Pero no una ola cualquier. Una ola gigantesca que emergió en la Playa do Norte, surfeada por la leyenda del surf, el surfista havaiano Garret McNamara en 2011. Esta avasalladora ola con más de 30 metros de altura ha cambiado para siempre el destino de esta pintoresca ciudad costera conocida como Nazaré – Center of Portugal. O como dicen los surfistas: Naza!
Pero Nazaré no es solo olas de quitar la respiración. De hecho, Nazaré es una encantadora ciudad de pescadores y una estancia de veraneo colorida, donde se siente la enorme importancia de la tradición. Nazaré se ha desarrollado de una forma muy sostenible a lo largo de los años, rindiendo homenaje a su patrimonio común y a la memoria histórica.
Una de las imágenes más conmovedoras de Nazaré son los jureles – «carapaus» – secando al sol. O sus preciosos barcos herviendo de colores y de mensajes sobre la vida. O las simpáticas mujeres con sus 7 faldas vendiendo frutos secos o hablando alto. Como si el tiempo se hubiera detenido. Como las mujeres vestidas de negro, brillantemente retratadas por la lente del grande fotógrafo francés Henri Cartier-Bresson. Son ellas el alma del local.
La gastronomía local es una pasada, consistiendo sobretodo de especialidades de marisco o de pescado, como las caldeiradas de pescado y el pescado seco, que no podrá perder en Nazaré!
La mejor vista de Nazaré se obtiene a partir de Sítio, donde podrá llegar de funicular. Este es el punto ideal para contemplar esta maravillosa ciudad costera, mientras siente el viento en el rostro. El mar como nunca lo ha visto antes. Bienvendo a Nazaré!
